Os voy a recomendar la serie que me ha tenido enganchada la última semana: Erase una vez... (Once upon a time...). Tiene cuatro temporadas terminadas en español y la quinta saldrá en septiembre.
No es que sea una maravilla (es más, los efectos especiales dejan un poco que desear), pero es una buena forma de revivir los cuentos infantiles desde un ángulo diferente, más adulto.
Muchos personajes que creíamos adorables, aquí tienen un lado oscuro muy curioso. Por ejemplo, la abuelita y Caperucita roja en realidad son mujeres lobo. Y otros malvados que odiábamos en nuestra infancia tienen un corazoncito y solo desean ser felices.
A lo largo de las temporadas van apareciendo nuevos personajes, todos entrelazados de alguna forma. Más o menos todos los villanos y héroes de nuestros cuentos de infancia aparecen, haciendo sitio a los más recientes. En la última temporada hacen aparición durante bastantes capítulos los de Forzen y su reina Elsa.
Todo empieza por un libro mágico en el que se relatan los cuentos. Los protagonistas están encerrados en un pueblecito sin magia de la actualidad, y necesitan a Emma Swan, la Salvadora hija de BlancaNieves, para recuperar sus memorias y sus vidas. Durante toda la serie se mueven entre diferentes mundos y saltos temporales. Regresando al País de Nunca Jamás, la tierra de Oz, el Bosque Encantado... y nos muestra tanto el presente de los personajes como el pasado que les hizo ser quien ahora son.
Al igual que ellos, todos queremos nuestro final feliz de cuento y con series así vemos la realidad: cuando estamos a punto de alcanzarlo todo se descalabra y nos toca esperar a que se arregle en una nueva temporada.
Yo por mi parte seguiré buscando ese fueron felices y comieron gofres de Nutella sin engordar.
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