domingo, 2 de marzo de 2014

Evadirse

 No recuerdo el momento en que empecé a leer. Pero sí recuerdo el primer libro que leí sin ayuda: Barba azul. Una lectura curiosa para una niña tan pequeña. Y es que no fui una niña corriente.  

 Los libros fueron mi refugio y mi salvación. Como hija única no tenía con quién jugar, y por eso la mejor compañía eran mis libros que me llevaban a otro universo donde podía ser quien yo quisiera y hacer cualquier cosa. Fui princesa, maga, elfa, detective, actriz e incluso florista. Estuve en todas las épocas pasadas, presentes y futuras. Visité medio mundo cual Willy Fog. 

 A mi cuarto de siglo puedo decir que gracias a los libros he sentido pasión, tristeza, amor, odio... He llegado a tenerle más cariño a un personaje que a alguno de mis amigos de carne y hueso. Por eso nunca abandoné la lectura. Y ahora leo más que nunca, tengo tiempo y por eso quiero empezar una nueva aventura. Un blog para lo que realmente me gusta.

 Durante 2013 leí la friolera de 215 libros, de todo tipo. Y en lo que va de 2014 ya son 16 los que han pasado por mis manos.

 Porque un libro no es solo una distracción para viajes en tren. Un libro para mí es el mejor método de evadirme. Lo vivo, lo siento, los llego a amar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario